¿CÓMO USAR UN TERMOSTATO DE CALEFACCIÓN Y AHORRAR ENERGÍA?
Para usar correctamente un termostato de calefacción y ahorrar energía, debemos tener claros algunos conceptos sobre la temperatura:
* Temperatura de inercia:
Es la temperatura mínima que hay en tu vivienda, independientemente de las condiciones exteriores. Depende de la envolvente, la ubicación, el aislamiento, la altura de la vivienda etc.
* Temperatura de confort:
Es la que proporciona una sensación térmica agradable.
La diferencia que existe entre la temperatura de inercia y la temperatura de confort se denomina temperatura intermedia. Lo más aconsejable es que entre la intermedia y la temperatura de confort la diferencia no sea superior a 5ºC, ya que cuanta más diferencia exista, más combustible se consumirá por la caldera para llegar a la temperatura fijada.
Ejemplo:
Temperatura de confort: 21ºC
Temperatura de inercia: 14ºC
Temperatura intermedia: 14ºC-21ºC = -7ºC
En este caso la diferencia es superior a 7ºC con lo que sería recomendable mantener la temperatura de inercia en un valor superior (16ºC)
* Ahorro de energía
Para no derrochar energía, el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios, fija una temperatura interior de confort para invierno de 21-23ºC. Fuera de este rango, estaremos derrochando energía.
Una variación de 1ºC supone un aumento de consumo de un 7% aproximadamente.
Si disponemos de una caldera de condensación debemos emplear termostatos modulantes con sonda exterior
Si nos lo podemos permitir, sustituir los termostatos de calefacción convencionales por cronotermostatos digitales