Las reformas se acometen cuando llega la estabilidad en el tiempo. Y son, principalmente, para acondicionar nuestro hogar y estar más a gusto. Para ello te recomendamos el suelo radiante, por la calidez que aporta cuando hace frío y por muchas otras ventajas que te contamos a continuación:
La gran ventaja de este sistema de calentamiento es que incide sobre la temperatura resultante, en la que intervienen la temperatura radiante media y la temperatura seca del aire, de modo que, en este caso, al haber una temperatura radiante media más alta, puede bajarse la temperatura seca del aire dos o tres grados, disminuyendo en esa medida las pérdidas de calor del local hacia el exterior, sin disminuir las prestaciones en cuanto a comodidad térmica (sensación térmica).
Es un sistema que produce movimientos reducidos del aire, dada la baja temperatura de emisión y la extensión del emisor y conviene por ello en locales de techos altos, evitando en gran parte el problema de la estratificación térmica del aire, que acumularía el aire caliente en la parte superior del local, lejos de la zona ocupada.
Las principales ventajas de instalar suelo radiante son:
CONFORT:
En una instalación de suelo radiante el confort es muy superior a los radiadores convencionales. Y esto es así ya que la temperatura está distribuida por igual en todas las estancias. Todo el suelo es un gran radiador de baja temperatura.
¡Pies calentitos y sin dolores de cabeza!.
EL AHORRO:
El ahorro con respecto a los radiadores convencionales puede ser de hasta un 30% anual. Además como el agua que circula por los tubos que hay bajo el piso tiene una temperatura baja de 35-40ºC (Aproximadamente) comparada con los radiadores de 70-80ºC, puede utilizarse la energía solar térmica como apoyo del sistema convencional (caldera, bomba de calor, etc.) y ahorrar un 30% o un 40% anual.
SEGURIDAD:
La instalación de suelo radiante en casa aumenta la seguridad.Los niños son los grandes beneficiarios del suelo radiante. Gatear, jugar en el suelo, gatear, ir descalzo por casa ya no supone resfriarse. Al no existir radiadores con temperatura elevada, no existe riesgo de quemaduras.
EL SUELO RADIANTE NO RESECA EL AMBIENTE:
El sistema de calefacción por suelo permite refrigerar la vivienda en verano sin chorros de aire frío directos ni resecando el ambiente. La humedad de su vivienda se mantendrá invariable.
EVITA PELUSAS Y RADIADORES:
Instalar suelo radiante en casa evita que se generen corrientes de convección que mueven el polvo y generan pelusas. Además la distribución del mobiliario y la decoración tampoco se verá condicionada por la existencia de radiadores ya que no existen en este sistema.