Quien tiene una cubierta para aprovechar el sol puede tener un tesoro. Los usuarios ya tienen la posibilidad del autoconsumo instalando un tejado solar. Gracias a poderse acoger a las ventajas que comporta un nuevo contexto normativo caracterizada por la supresión del denominado impuesto al sol, la eliminación de trabas burocráticas (en el real decreto aprobado el pasado 5 de abril) y el abaratamiento de costes (del 90% en los últimos 10 años).
Las mayores facilidades que recibe el autoconsumo han creado un marco más optimista. Las inversiones para las instalaciones domésticas de autoconsumo pueden amortizarse en unos 12 años, mientras que en el caso de las empresas ya se logra al cabo de entre 5 y 7 años.
Pero siempre conviene hacer números y asesorarse antes de emprender un proyecto.